Saint-Étienne. El ejemplo francés.
En 2020 la Cámara de Comercio de Gijón proyectó una charla sobre la fábrica de armas de Saint-Étienne que luego hubo de ser cancelada debido a la pandemia. Se trataba de exponer cómo las diferentes administraciones se habían puesto de acuerdo para reconvertir el antiguo complejo fabril, que había tenido una historia de auge y declive similar a la de la fábrica de La Vega.

Famosa desde la Edad Media por su producción de espadas, la ciudad francesa de Saint-Étienne vio nacer ya en el siglo XVIII la Manufacture d’Armes de Saint-Étienne. La actividad de la fábrica creció exponencialmente durante la Revolución Francesa y, posteriormente, para abastecer de armas al ejército de Bonaparte. La fábrica se modernizó a partir de la segunda mitad del siglo XIX y continuó su actividad hasta cerrar sus puertas en 2001.
Los terrenos de la antigua fábrica albergan hoy en día escuelas de ingeniería, un laboratorio del centro nacional de investigación francés y un floreciente vivero de empresas tecnológicas. Pero el proyecto abarca una zona más amplia que la de la antigua fábrica en la que hay cabida para el el teatro y otros espectáculos.